•  
  •  
 

Abstract

Type-conversion of coastal scrub to exotic annual grassland has been extensive in certain parts of southern California, especially in drier inland locales. Field observations suggest that rock outcrops harbor native perennials associated with coastal scrub vegetation after conversion to exotic annual grassland has occurred. Surveys were conducted to test this observation. In addition, measures of fossorial mammal disturbance, soil depth, exotic annual plant abundance, and soil moisture were collected and used to infer potential mechanisms that may influence patterns of native and exotic vegetation. Results showed that larger outcrops are associated with more native perennial species than smaller outcrops, consistent with predictions based on species-area relationships. In addition, the edges of rock outcrops were shown to have greater native perennial species richness than the surrounding exotic annual grassland matrix. Higher soil moisture, lower soil depth, and less disturbance by Botta’s pocket gopher (Thomomys bottae) were also found at the edge of rock outcrops compared to the surrounding grassland matrix. Furthermore, soil depth was positively correlated with pocket gopher disturbance and with exotic annual grass cover. Rock outcrops serve as refuge habitat for native coastal scrub perennials in areas where exotic annual grasses have become dominant. Rock outcrops may become increasingly important for conservation efforts if remaining coastal scrub vegetation continues to deteriorate.


Ha sido extensa la conversión de matorral costero a pradera anual exótica en ciertas partes del sur de California, especialmente en localidades áridas del interior. Observaciones de campo indican que los afloramientos rocosos albergan plantas perennes nativas asociadas con vegetación de matorral costero después de la conversión a pradera anual exótica. Llevamos a cabo estudios para comprobar esta observación. También medimos la perturbación por mamíferos fosoriales, la profundidad del suelo, la abundancia de plantas anuales exóticas y la humedad del suelo para inferir los posibles mecanismos que pudieran influenciar la distribución de vegetación nativa y foránea. Los resultados mostraron que los afloramientos rocosos grandes se asocian con más especies de plantas perennes nativas que los afloramientos pequeños; esto concuerda con predicciones basadas en relaciones especies-área. Además, los bordes de los afloramientos rocosos demostraron tener mayor riqueza de especies de plantas perennes nativas que la pradera exótica circundante. También encontramos mayor humedad del suelo, menor profundidad del suelo y menos perturbación ocasionada por la tuza de Botta (Thomomys bottae) en el borde de los afloramientos rocosos en comparación con la pradera circundante. Además, la profundidad del suelo estuvo correlacionada positivamente con la perturbación por tuzas y con la cubierta de pastos anuales exóticos. En resumen, los afloramientos rocosos probaron servir de hábitat de refugio para plantas perennes nativas del matorral costero donde han llegado a dominar los pastos anuales exóticos. Los afloramientos rocosos podrían volverse cada vez más importantes para los esfuerzos de conservación si la vegetación restante del matorral costero sigue deteriorándose.

Share

COinS